Devoción y fervor en torno al Cristo del Consuelo
Un gran número de cazorleños procesionaron la venerada imagen por diferentes barrios del municipio serrano
La devoción que los cazorleños sienten por el Cristo del Consuelo es tan grande que volvió a ponerse de manifiesto en la procesión, donde la imagen estuvo acompañada por centenares de devotos.
La comitiva partió de la iglesia de San Francisco, allí la venerada imagen tiene su sede junto al altar mayor, con un amplio repique de campanas y los sones del himno nacional, a cargo de la Banda de Música de Cazorla, precedida por dos largas hileras de fieles que, en su mayoría, portaban velas alumbrando el recorrido.
La imagen, un cuadro de grandes dimensiones que representa a Jesús crucificado, fue portada por una veintena de costaleros, que vestían con un atuendo de color rojo. Delante de ella marcharon los miembros de la junta de gobierno de la hermandad y, tras ella, el alcalde, Antonio José Rodríguez Viñas, miembros de la Corporación Municipal y autoridades civiles y religiosas. Cerró la Banda Municipal de Música de Cazorla, que amenizó el recorrido con distintas marchas procesionales brillantemente interpretadas. A lo largo de la historia, en Cazorla se han venerado a tres cuadros distintos del Cristo del Consuelo. El primero, al parecer, fue un encargo de los marqueses de Camarasa, en el siglo XVI, y en la parte inferior, a ambos lados del Crucificado, aparecían los propios marqueses retratados. Pero como estos mantuvieron algún tipo de rifirrafe, un largo pleito, con el Arzobispado de Toledo, este no vio con buenos ojos que el pueblo de Cazorla venerase esa imagen y se sustituyó por otro cuadro en el siglo XVII.
Este segundo Cristo del Consuelo estaba inspirado en el Cristo de Velázquez y, según se cuenta, se salvó de una grave inundación de 1694 que se cobró en Cazorla varias decenas de muertos. Los cazorleños consideraron ese hecho como milagroso y su devoción se acentuó hasta límites insospechados, de hecho, es costumbre en este pueblo bautizar a niños varones con el nombre de Consuelo. Ese segundo cuadro fue quemado durante la Guerra Civil, el día de Santiago, una semana después de haber estallado el conflicto.
La tercera imagen fue encargada por la cofradía apenas fue tomada Cazorla por el bando nacional, en 1939. Esta es la que procesionó ayer por las calles de diferentes barrios del municipio.
Las actividades del día grande de la Feria y Fiestas de Cazorla comenzaron tempraneras, a las 8 de la mañana, con una alborada, repique de campanas y disparo de cohetes, que anunciaban el día grande la feria y fiestas. Le siguió una diana floreada a cargo de la Agrupación Musical Jesús Cautivo de Cazorla. Posteriormente, a las 11, en la iglesia de San Francisco tuvo lugar una fiesta religiosa en honor del Santísimo Cristo del Consuelo. Asistió la Corporación Municipal y los miembros de la cofradía. Intervino en la misa la Coral Santísimo Cristo del Consuelo con un selecto repertorio para tan destacada ocasión. A partir de las 13:30 horas, los cazorleños se volcaron con la Feria de Día, en el Auditorio del Parque, donde tres cantantes de copla locales amenizaron la tarde, Cristin Soria, Paqui Santos y Sergio Fábregas.
Paralelamente, desde las 11:30 hasta las 15:30, en la Plaza de la Corredera, los niños se lo pasaron en grande con los castillos hinchables, talleres, futbolín humano, hinchables multiobstáculos, supertoboganes y otros juegos.
A las 20:30 horas “El Peseta” actuó en al caseta de día del auditorio del Parque. A las 23:00 y hasta la madrugada hubo guardería infantil con múltiples juegos, en el gimnasio del instituto Castillo de la Yedra. Mientras tanto, a media noche, la caseta municipal acogió una verbena amenizada por la orquesta Moonlight & DJ JJ Soria, que incluyó fiesta de whisky con azafatas y regalos.
Hoy martes, las actividades comenzarán a las 11:00 horas con un paseo a caballo por las calles del municipio, de jinetes locales.