Dieciséis pueblos en riesgo

Desde 2002, desciende el padrón en 69 de los 97 municipios

    28 ene 2017 / 11:31 H.

    La Federación Española de Municipios y Provincias habla de que la mitad de los pueblos españoles está al borde de la desaparición. Para dar este contundente dato, se basa en el hecho de que tengan menos de mil habitantes y escasa o nula tasa de reposición. En Jaén, hay 16 municipios que coinciden con el patrón. El que menos almas censadas tiene es Hinojares, con 338 habitantes. En los últimos 15 años, desde 2002, cuando había 467 empadronados, pierde habitantes. A este ritmo, solo con hacer un regla de tres, se deduce que no existiría en unos 40 años. En esta peligrosa franja están, además de Hinojares, Santa Elena, Escañuela, Lupión, Torres de Albanchez, Cazalilla, Santiago de Calatrava, Espelúy, Hornos, Higuera de Calatrava, Carboneros, Génave, Aldeaquemada, Larva, Benatae y Villarrodrigo. Con menos de 1.100, Albanchez de Mágina, Iznatoraf, Villardompardo y Chiclana de Segura, este último, con 1.002 habitantes y también en la listas de aquellos municipios de Jaén que se empequeñecen desde hace tres lustros.

    Los datos son elocuentes. Desde 2002 —cuando la provincia llegó al número de municipios actual—, la población desciende en 69 de los 97 pueblos y ciudades, según los datos del Instituto Nacional de Estadística (INE). Al margen de los casos específicos de núcleos de menos de mil habitantes, la mayor caída en número de habitantes es la registrada en Santiago-Pontones, con 1.087 vecinos menos, entre 2002 y 2016, como se comprueba en la tabla adjunta. Y es que la despoblación es generalizada y comprende a todas las comarcas, es decir, Segura, Cazorla, Las Villas, Mágina, la Campiña, La Loma, las áreas de Linares y Jaén, El Condado y la Sierra Sur.

    La provincia mengua, aunque en los tres lustros de referencia, el aumento global del censo es de 853 personas; sirva como ejemplo que solo de 2015 a 2016, según el INE, hay 5.520 jiennenses menos, lo que sitúa a este territorio a la cabeza en el descenso del país, por detrás de Asturias, Ciudad Real y Zaragoza. En este contexto, lo que también se aprecia es cierta concentración en torno a las principales ciudades y el crecimiento absoluto de estas en el periodo de referencia, aunque, tampoco se libren de la pérdida de población puntual. Úbeda, Martos, Linares, Baeza, La Carolina Alcalá, y Jaén y su área metropolitana tienen más vecinos actualmente que en 2002.