El fuerte temporal afecta al olivar villanovense

La tormenta de agua y granizo caída en la tarde noche del pasado miércoles en distintos puntos de la provincia, también afectó con cierta gravedad al término municipal de Villanueva del Arzobispo, donde se vieron dañadas varias hectáreas de olivar. El fuerte aluvión de agua y granizo, unido a las rachas de viento tiró las aceitunas, dejó el fruto dañado en el olivo e incluso arrancó de raíz algún que otro árbol y numerosas ramas. La tormenta, que afectó sobre todo a la zona de olivar villanovense, entró por la Cañada de la Madera, donde en escasos minutos se contabilizaron unos treinta litros de agua para, seguidamente, continuar su curso en línea recta y salir por la parte alta de Cañada Catena. Así, los daños se sucedieron a lo largo de unos 15 kilómetros aproximadamente.

En referencia a los paisajes que rodean el núcleo de población de Villanueva del Arzobispo, el temporal también dejó su sello en parajes como la Cañada de la Madera, el Barranco de los Lobos, Los Granadillos y Matamala, lugares en los que, según los técnicos agrícolas, dejó gravemente dañadas entre doscientas y trescientas hectáreas de olivar por las diferentes zonas de plantación.

Ahora, los agricultores están muy preocupados por los avisos de fuertes tormentas que se preven para el resto de la semana. Además, según informaron los especialistas del sector olivarero de la almazaras villanovenses, durante estos días “habrá que trabajar en un tratamiento especial de cobre con los olivares que recibieron daño por pedrisco para así evitar posibles ataques de hongos o bacterias tanto al fruto como al árbol, ya que los daños del temporal no solo afectan a las aceitunas caídas al suelo, sino también a las que quedan colgadas con signos de daño de pedrisco”.

Actualmente, en palabras de los técnicos, es muy complicado cuatificar el total del daño producido por la tormenta y la pérdida que esta haya podido ocasionar en la producción de la gran cantidad de olivares afectados. “Hasta que no pase un determinado timpo no se podrán tener datos reales, pero es algo de lo que hay que preocuparse”. Con estas palabras, todos los agricultores de Villanueva del Arzobispo miran ahora con temor al cielo preocupados por un nuevo temporal de esta magnitud. [j. j. f.]