¿Están paralizadas las obras de la autovía de Linares a Albacete?

La respuesta oficial es que no, que las obras de la autovía entre Linares y Albacete están activas en la provincia jiennense. Se trata de tres tramos, entre Úbeda y Torreperogil; de este municipio a Villacarrillo y, a partir de ahí, hasta Villanueva del Arzobispo. En los Presupuestos Generales del Estado, el Ministerio de Fomento consigna 8,4 millones para esta demandada obra, de cuya necesidad se habla desde hace más de dos décadas. Son 7,8 millones para los trabajos entre los municipios ubetense y peroxileño, más 200.000 euros para cada uno de los tres tramos previstos entre Villanueva del Arzobispo y el límite de provincia. Además, la Sociedad Estatal de Infraestructuras de Transporte Terrestre tiene 35,9 millones para avanzar en la apertura de esta autovía entre Torreperogil y Villanueva del Arzobispo. Viento de cara para este proyecto, bendecido por el mismísimo presidente del Gobierno, ahora en funciones, Mariano Rajoy, que afirmó, hace menos de un año en Linares, que su objetivo es que hubiera máquinas trabajando en todos los tramos de la A-32 que todavía restan por materializar. Pero no es todo oro lo que reluce. Así lo aseguran las fuentes del sector de la construcción y del proyecto consultadas por Diario JAÉN, y que prefieren mantenerse en el anonimato para, de esta forma, proteger sus intereses. “Las obras están paradas, prácticamente desde 2008, apenas se hacen algunos trabajos menores, como retirar olivos y algún movimiento de tierras. Fomento pone un poco de dinero y, cuando se acaba, se detiene el avance de la autovía”, explican.

Públicamente, la Asociación de Constructores y Promotores de Jaén se expresó en unos términos parecidos, inquietos por el futuro de esta obra, al considerar que no era una buena noticia para el proyecto que no se haya formado todavía el Ejecutivo central. Curiosamente, en lugar de dar tranquilidad a aquellos que estén preocupados, desde la última semana, el PP, que es el partido que está en La Moncloa, comienza a sumarse a este temor. Lo hizo en boca del exsecretario general de los populares andaluces y delegado del Gobierno andaluz, Antonio Sanz, y copió el mensaje, ayer mismo, el líder del Partido Popular en Jaén y diputado, José Enrique Fernández de Moya. El mantra que comienza a extenderse en estas filas, para indignación de los socialistas, que hablan de “secuestro político”, es que la culpa de las desinversiones que sufran los jiennenses, y el resto de españoles, la tiene el secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, con su “bloqueo” a la candidatura a la Presidencia del Gobierno de Rajoy. La Subdelegación del Gobierno en Jaén admite que los fondos de la A-32 están considerados como partidas “finalistas” y que, ciertamente, la falta de Gobierno puede afectar su ejecución.

Los constructores consultados por este periódico, sin dejar de lado los problemas actuales, se retrotraen años atrás para explicar los motivos de que no haya una autovía entre Linares y Albacete, o lo que es lo mismo, la ausencia de una carretera moderna que conecte el Norte de Andalucía con el Levante. “Falta voluntad e inversión continuada, porque se trata de una obra sencilla, un proyecto fácil”, reflexionan. “Si Fomento hubiera apostado por la A-32 estaría más que construida”, argumentan. Sin embargo, apuntan, se optó por terminar la Y de Granada, es decir, la conexión de la vecina provincia con Almería y Málaga y desde la capital a la Costa Tropical, y por mejorar los accesos a Galicia desde el resto de España.

“La autovía A-32 podría estar abierta al tráfico en dos años y medio, como máximo. Las obras no implican apenas dificultades”, dejan claro los expertos consultados. Sin embargo, apenas se extiende asfalto y los trámites administrativos se eternizan. El pasado mes de julio, culminó el proceso para la modificación del trazado de la autovía entre Úbeda y Torreperogil, lo que permitirá llegar a acuerdos para pagar las expropiaciones pendientes y dará nuevos bríos a las obras, con un presupuesto de 70 millones.

Una plataforma se constituyó para pedir la ejecución de la autovía, a raíz de la decisión del anterior Gobierno socialista de paralizar los tres tramos entre Úbeda y Villanueva, sin construir seis años después, a pesar de estar adjudicados ya a tres empresas, OPR, una UTE participada por Peninsular de Contratas, y otra unión temporal de empresas, en la que está Sacyr. El colectivo constata que hay algunos trabajos, como mediciones, tala de árboles y la apertura de un desvío en la carretera Nacional 322, a la altura de la orujera villanovense de San Miguel. Sin embargo, cree que los problemas para formar Gobierno frenan el proyecto y considera que es preciso un aumento presupuestario. Como dato positivo, informan de la aprobación del proyecto de uno de los tramos en la provincia de Albacete.