Un homenaje al eminente oculista llegado desde Bilbao

Saudar descubrirá una lápida por la imborrable huella de Juan Martín Alguacil

30 ene 2019 / 12:00 H.

Un nuevo homenaje para un galduriense de corazón desde la ciudad en la que dejó una huella imborrable. El que se celebrará este viernes, 1 de febrero, era uno de los actos que la Asociación Cultural “Saudar” pretendía realizar desde hace tiempo. Por fin, este colectivo homenajeará a uno de los más destacados Hijos Adoptivos con los que cuenta Jódar, el insigne oftalmólogo Juan Martín Alguacil. Durante este acto, se procederá al descubrimiento de una lápida conmemorativa en el lugar de su sepultura, a partir de las ocho de la tarde, en la iglesia del Santo Cristo de la Misericordia.

Será tras la celebración de la misa que se oficiará por el sufragio de su alma, que dará comienzo a partir de las siete y veinte de la tarde, en el citado templo. Además, Ildefonso Alcalá Moreno, cronista oficial de Jódar, ofrecerá una conferencia bajo el título: “La figura de Don Juan Martín Alguacil en la historia de Jódar”.

El eminente oculista dejó tal huella en Jódar que no solamente da nombre a una de las calles, por acuerdo del 11 de mayo de 1912 siendo alcalde Pedro Muñoz Blanco —la antigua carrera de San Marcos, donde precisamente tenía su vivienda, en una casa que había comprado antaño al Marqués de Selvaflorida—, sino que se le recuerda con un busto que fue inaugurado en diciembre de 1954 y que todavía sigue en pie, en el Paseo Primero de Mayo. En aquel momento, se contó con la presencia de autoridades provinciales y locales, dando a conocer su vida y obra el por entonces alcalde, Manuel Luengo Fernández, encargándose Francisco Ruiz Martínez, registrador de la Propiedad de Tudela, de ofrecer un discurso en el que exaltó la figura de uno de los más reconocidos oftalmólogos.

En su “Historia de Jódar”, Narciso Mesa recoge, al hablar del oculista, que “lo que debe el pueblo al Martín Alguacil, casi nadie lo ignora, oculista distinguido, emparentado con familias que entonces estaban en el primer plano de la política nacional, pudo serlo todo en Madrid o en otra población pero prefirió quedarse en Jódar, dando lugar a que el nombre de nuestro pueblo fuese conocido fuera de España y que, en peregrinación, puede decirse, viniesen a buscarlo, enfermos nacionales y extranjeros, para que aliviase sus dolencias”.

Con este acto, la Asociación Cultural “Saudar”, en nombre también del pueblo de Jódar, quiere distinguir una figura que, a pesar de los años, sigue viva tras el legado que dejó. Un bilbaíno que convirtió su consulta en Jódar en un centro desde el que llegaban personalidades desde todas las partes de España, lo que contribuyó a que Jódar fuese conocido más allá de sus propias fronteras.