La almazara más antigua desvela todos sus secretos

Las puertas de Pydasa se abrieron, de par en par, para recibir a los más de treinta vecinos que, a las diez de la mañana, se congregaron en su patio de acceso para visitar las instalaciones de la fábrica de aceite más antigua de Martos. De paso, disfrutaron de un desayuno saludable en el marco de uno de los edificios historicistas más representativos de la ciudad de La Peña. El alcalde, Víctor Torres y los concejales de Agricultura y Olivar y Comercio y Turismo, Emilio Torres y Lucía González, respectivamente, asistieron a la cita, enmarcado en la programación de la Fiesta de la Aceituna.

Jesús Gálvez, gerente de la almazara, recibió a los visitantes y les hizo de guía en la visita a las instalaciones, donde explicó el proceso de fabricación del aceite que mantiene una línea invariable, de molturación artesanal, desde la primera mitad del siglo XX. Respecto a la construcción de la vivienda, en el más puro estilo francés, Gálvez dijo que se remontaba a los años veinte del siglo pasado e invitó a los presentes a imaginar que por aquel entonces la propiedad se encontraba en mitad del campo, donde la calle más próxima era la de La Teja. En aquella época, puntualizó el gerente, “en Martos existían del orden de setenta fábricas de aceite, la mayoría con uno o dos molinos”. Respecto al edificio que alberga la fábrica, Gálvez señaló que data de 1941, como reza una inscripción en el acceso principal junto a un azulejo con la representación de Santa Rosa.

Guiados por Jesús Gálvez, los visitantes hicieron parada en la zona de recepción de aceitunas, donde apreciaron las cribas y las tolvas de carga con cinta transportadora hacia las dos líneas de producción, la continua y la tradicional, que ya ha molturado los frutos tempranos y obtenido los primeros zumos de la temporada. En respuesta a las preguntas de los asistentes, Gálvez informó de que, de los ochenta millones de kilos de aceitunas que las almazaras marteñas procesan al año, en Pydasa solo se trabajan del orden de tres o cuatro millones de kilos. Sin ser la que procesa mayor cantidad de aceituna, aseguró el gerente, “sí obtenemos las mejores calidades.”