Seis municipios cumplen cien años del cambio en su nombre

La medida se adoptó para diferenciarlos de otros con la misma toponimia

04 sep 2016 / 11:36 H.

Seis municipios de la provincia de Jaén añadieron, hace ahora un siglo, a su nombre un “apellido” para diferenciarse, así, de otros con la misma toponimia existentes en España. Fue un Real Decreto, firmado por el rey Alfonso XIII, que afectó a 573 ayuntamientos.

El “rebautizo” se publicó en la Gaceta de Madrid —el Boletín Oficial del Estado de entonces—, en su número 184, el 2 de julio de 1916. De la provincia de Jaén el cambio de nomenclatura solo afectó a seis y en alguno de ellos, como es el caso de Albanchez de Úbeda, el “apellido” impuesto no le gustó nada a los albanchurros, quienes, con el paso del tiempo, se lo volvieron cambiar por otro con el que sí se identifican. Estos municipios son: Albanchez de Mágina, Fuensanta de Martos, La Guardia de Jaén, La Puerta de Segura, Sorihuela del Guadalimar y Valdepeñas de Jaén.

De todos ellos, solo en el Ayuntamiento de Sorihuela estaban al tanto del aniversario del cambio de toponimia. Su alcalde, José Manuel Leal, informa que están organizando diferentes actividades: “Nos sentimos muy orgullosos de que nuestro pueblo tomase el nombre de nuestro río. Hemos organizado ya actos actos las fiestas y vamos a crear una comisión para que organice otras actividades conmemorativas a lo largo del año”. Con motivo de sus fiestas, Sorihuela distribuyó un díptico en el que recoge el Real Decreto del 2 de julio de 1916, con el lema: “100 años de unión de la villa con su río en un mismo nombre”.

ALBANCHEZ. En el caso de Albanchez, su alcalde, Alejandro Morales, comenta que ellos no tienen nada que celebrar, porque no se sentían identificados con Úbeda y por ello, en 2005, Albanchez de Úbeda pasó a denominarse definitivamente “de Mágina”. Esa historia parte de la Reconquista, con Fernando III. Albanchez pertenecía al señorío de Jódar que en 1238 fue vendido a Úbeda. Luego, en 1309, quedó como aldea de Bedmar. En Fuensanta de Martos pasa otro tanto. La alcaldesa, Francisca Molina, manifiesta que el Ayuntamiento tiene solicitado volverse a llamar solo Fuensanta, “pero este cambio de nombre aún no nos lo han concedido oficialmente”.

Los demás alcaldes y alcadesas aseguran que desconocían este dato. Pero, como se suele decir, más vale tarde que nunca, y no descartan, dicen, organizar alguna actividad por el centenario. Al fin y al cabo, es conocer su propia historia.