La construcción del recinto ferial se reanudará este mes

Con el plan de seguridad listo, Tragsa espera “luz verde” del Ayuntamiento

02 feb 2017 / 17:12 H.

Las obras del recinto ferial que se construye en Torredelcampo desde agosto del pasado año 2016 se reanudarán a mediados de este mes de febrero. La empresa pública Tragsa, encargada de ejecutar el proyecto, tiene elaborado el plan de seguridad y nombrados sus coordinadores, y está a la espera de que el Ayuntamiento lo apruebe y se dé luz verde al comienzo de las intervenciones.

La previsión es que el recinto esté totalmente acabado para los primeros meses del 2019. Según el concejal de Desarrollo, José Quesada, el objetivo de los trabajos es cumplir con el techo de gasto que, desde el Gobierno Central, se impone a las administraciones locales. La duración total de las intervenciones será de 28 meses, y se destinará anualmente al proyecto una inversión aproximada de unos 800.000 euros.

La primera fase de movimiento de tierras con la que se inició la urbanización de la parcela contó con un presupuesto de 300.000 euros. Las obras se paralizaron a finales del pasado año ante la necesidad de acometer algunos trámites burocráticos y modificaciones en el proyecto, para el que se contempla una inversión total de 1,7 millones de euros. El recinto dotará al municipio de un espacio abierto y polivalente de 47.000 metros cuadrados, provisto de servicios de calidad, zonas abiertas y jardines.

La urbanización contará con viales y espacios verdes, y estará bordeada por una vía de doble sentido en paralelo a la autovía, dotada de una amplia zona de aparcamiento de más de 8.780 metros cuadrados. También contará con un nuevo auditorio municipal de más de 4.000 metros, zonas para atracciones, restauración, casetas, puestos diversos, módulos de aseos y servicios, zonas de emergencias para retenes y una glorieta de regulación de accesos desde la autovía. La idea comenzó a fraguarse desde 2005, cuando el Ayuntamiento dio los primeros pasos para acometer el proyecto mediante la aprobación de un convenio urbanístico y las oportunas negociaciones con los propietarios de los terrenos. Posteriormente, en 2008, se aprobó el cambio de planeamiento y de sistema de actuación en la unidad de ejecución discontinua que afectaba a las unidades de la Vega y la Boca del Túnel. La ubicación y el acceso directo desde la autovía ofrece al recinto un atractivo más, ya que puede convertirse en un buen escaparate de la ciudad y de sus actividades sociales y festivas.