Instrumentos de tortura en una muestra en “El Portillo”

Los visitantes podrán ver distintos artilugios utilizados por el Tribunal de la Inquisición durante la Edad Media

25 may 2018 / 08:25 H.

El Centro de Interpretación Torreón del Portillo de Santo Cristo, gestionado por la empresa turística Atlante junto a otros dos espacios de interés, como el Centro de Interpretación Andrés de Vandelvira y la Torre del Reloj, inauguró, en la mañana de ayer, una exposición denominada “Instrumentos de tortura y humillación”, que podrá ser visitada hasta el próximo 17 de junio.

Esta muestra es un ejemplo de la gestión y la planificación incluidas en el proyecto presentado por Atlante para dinamizar esos lugares, de manera que resulten más interesantes para el público. “La exposición se encuentra enclavada en un maravilloso y estratégico espacio monumental de la ciudad, que fue rehabilitado y recuperado para ser un atractivo turístico más que el municipio oferta a residentes y visitantes”, puntualizó la responsable del área de Turismo, Elena Rodríguez, que agregó: “Con esta muestra vamos a acercarnos a una época muy negra de nuestra historia, en la que la Inquisición utilizaba, precisamente, estos métodos, que hoy en día son una barbarie, para tener a los ciudadanos muy controlados”.

Asimismo, la concejal de Turismo recordó que las visitas a los tres espacios —el Centro de Interpretación Andrés de Vandelvira, la Torre del Reloj y el Centro de Interpretación Torreón del Portillo del Santo Cristo— son gratuitas para los empadronados en la ciudad y tendrá un coste de 3 euros, para los turistas, aunque pueden aplicarse descuentos específicos para grupos, aclaró la edil.

Por su parte, Julia Carretero, gerente de la empresa turística Atlante, manifestó que la exposición enseña “lo retorcido que puede llegar a ser el ser humano”. Así, los visitantes contemplarán instrumentos de tortura y humillación que se empleaban hace siglos, como los collares para jugadores de cartas, un “aplastacabezas”, el cepo, el garrote, el potro o ecúleo, el tormento de agua, la horquilla o tenedor de los herejes, la trenza de paja, el popular “sambenito” o la cuna de Judas.

Carretero habló de algunos de los artilugios de la colección y puso varios ejemplos gráficos acerca del padecimiento que sufrían las personas sometidas a ellos. “Aunque algunos, en nuestros días, puedan parecer graciosos e incluso inofensivos afligían tormentos insoportables a los ajusticiados”, subrayó la gerente de la empresa Atlante. “Entre otros instrumentos, sobresalen el padecimiento del cepo, que vemos en películas o en el que muchas personas se hacen fotos en parques temáticos o ferias. Decían que era dolorosísimo e insoportable, pues además de soportar que lanzaran todo tipo de objetos al ajusticiado o acusado, podían hacerle cosquillas”, dijo. También habló de la trenza de paja colocada a mujeres infieles, una vez que le rapaban la cabeza. Esas torturas se solían hacer en las plazas para que la ciudadanía viera lo que le podía pasar si no cumplían con las leyes marcadas.