Quejas por el cierre parcial de la biblioteca en navidades

La Biblioteca Municipal Juan Pasquau volvió a estar, la pasada Navidad, en el “ojo del huracán”, pues a las quejas de los usuarios por la falta de calefacción en la sala de arriba —que es mucho más amplia, moderna, luminosa y mejor equipada que la de abajo— se le sumó que el inmueble permaneció cerrado por las tardes, durante las últimas semanas, con masificación de la estancia destinada para el estudio. Habitualmente se cierra en horario de tarde la parte de arriba, cuando algunos de los trabajadores de la biblioteca ubetense disfrutan de vacaciones.

La anterior campaña navideña fueron las quejas de los usuarios de este servicio a través de las redes sociales las que consiguieron que ambas salas permanecieran abiertas en horario de mañana y tarde. Sin embargo, en esta ocasión no fue así. Por ello, el grupo de Izquierda Unida y el Partido Comunista de Andalucía en Úbeda se hacen eco de la situación vivida por decenas de estudiantes con necesidad de encontrar un espacio donde concentrarse para preparar sus exámenes.

Además, desde las dos formaciones políticas, a raíz del descontento de los alumnos, afirman que se le propuso a la administración local que se analizara la posibilidad de crear una sala de estudio especial para estas fechas, la cual generaría entre dos o tres puestos de trabajo en una ciudad, como Úbeda, que cuenta con unos cuatro mil parados. Una iniciativa que ya se puso en marcha en otros municipios de la provincia como Linares o Andújar, dijeron los portavoces de Izquierda Unida y el Partido Comunista de Andalucía.

Asimismo desde los dos movimientos políticas se avisó al equipo de Gobierno, a cargo del PSOE, de que volvería a haber problemas si no se atendía a las demandas tanto de ellos como de los afectados, puesto que faltaría espacio y solo tendrían la posibilidad de estudiar aquellas personas que fueran más rápidas en ocupar las plazas de la sala de abajo de la biblioteca, único espacio para preparar exámenes abierto en horario de tarde. Hacen hincapié desde IU y el PCA en que la solución no se encuentra en esperar que se produzcan las quejas para intervenir, sino en la capacidad de escuchar y dar voz a las diferentes capas sociales y populares, con la convocatoria del Consejo de la Juventud, para que los universitarios y otros alumnos tengan voz ante las autoridades y se recojan sus necesidades y las atiendan.