Un nuevo desprendimiento en la carretera del Parque Natural

Vecinos de Burunchel reclaman medidas para evitar caídas de rocas en la A-319

24 nov 2016 / 17:15 H.

Una piedra de enormes dimensiones se descolgó ayer de la pared bajo la que discurre buena parte de la carretera A-319, que atraviesa el Parque Natural de Cazorla, Segura y Las Villas. El desprendimiento afectó a esta vía, a la altura del kilómetro 19, en una zona conocida como Rechita, no lejos de la Fuente del Céfano, en el término de La Iruela. El alcalde, el socialista José Antonio Olivares, explica que solo hay que lamentar los daños materiales y reponerse del susto, sin que haya mayores consecuencias. Cree que lo ocurrido entra “dentro de la normalidad” al atravesar la A-319, una reserva medioambiental, y le resta importancia. Sin embargo, vecinos de la zona sí creen que hay motivos para preocuparse y apuestan por la adopción de medidas que minimicen este tipo de episodios, que se repiten con cierta frecuencia. Y es que recuerdan que, ya en 2013, un peñón cayó ladera abajo, prácticamente, en el mismo lugar. “El autobús que lleva a los alumnos de Burunchel hasta Cazorla pasa por esta carretera y la A-319 tiene un importante trasiego, tanto de turistas como de vecinos de poblaciones como Arroyo Frío”, argumenta uno de los residentes en la zona.

Esta preocupación hace que algunos habitantes de Burunchel estudien qué tipo de medidas pueden poner en marcha para “presionar” a aquellos que tienen la responsabilidad de garantizar la seguridad en la carretera. La vía es de titularidad autonómica, por lo que los encargados de retirar los restos de roca y restablecer el tráfico fueron los equipos de conservación y mantenimiento de la Consejería de Fomento y Vivienda. Los trabajos de limpieza de la calzada fueron rápidos y se desarrollaron sin complicaciones. El delegado de esta área de la Junta, Rafael Valdivielso, explica que, una vez solventada la urgencia de reabrir la A-319 con garantías en este punto de su recorrido, una de las medidas que se estudia es la colocación de mallas metálicas para que no haya nuevos desprendimientos o, al menos, contener las rocas. A consecuencia de las lluvias de los últimos días, además de este accidente, también quedó cortada al tráfico la carretera que conecta Baños de la Encina y Guarromán, tal y como informa la Administración local bañusca en su página web. Aunque las precipitaciones fueron abundantes hasta ayer, no causaron demasiados problemas en los 97 municipios ni en la red viaria provincial.