Una escuela de música propia
La banda realiza una encomiable labor con muchos niños y jóvenes que aprenden a tocar un instrumento y constituyen su cantera de nuevos músicos
La dirección de la formación musical marteña la asumió desde su inicio Juan Antonio Martos Martínez quien, en septiembre de 2002 contó con la colaboración de Francisco Javier González Ríos, director de la Banda de Cornetas y Tambores de “Las Cigarreras”. Es en ese año cuando la Banda del Cristo de la Fe impulsa la creación de una escuela de música propia, que hoy día sigue en funcionamiento, con el fin de preparar, tanto musical como personalmente, a las nuevas incorporaciones.
Con gran trabajo y pensando en el bienestar de sus componentes, se adquirió, en 2008, un local de ensayo totalmente acondicionado en insonorización y acústica, que permite la preparación de sus compromisos y el desarrollo de su actividad musical de manera continuada durante todo el año, con todas las comodidades de las que antes carecían. Ese mismo año entraría a formar parte de la dirección musical Eduardo Sánchez Bonilla, que junto con la incorporación de Francisco Liébana Cámara en 2016, conforman la actual dirección musical, con el propósito de contribuir a la evolución y progresión de la banda. En los años siguientes, experimenta un progresivo crecimiento, reafirmándose en el panorama musical cofrade y siendo requeridos sus sones, tanto en diversos municipio andaluces y en ciudades como Sevilla, Córdoba, Málaga, Cádiz, Granada, Jaén, Ciudad Real, Albacete, Madrid... Cabe destacar su participación junto a otras bandas del ámbito nacional en el trabajo discográfico “Así suena la Semana Santa en España”, con varias composiciones propias.
El estilo musical que desde su origen ha inspirado a esta formación se ha basado principalmente en el modo de interpretación adoptado por la Banda de “Las Cigarreras”, que tan presente ha estado en su historia. Sin embargo, en la actualidad, esta banda ha logrado consolidar su propio estilo musical. Adaptándose tanto a las tendencias de las últimas décadas, como a las exigencias de las distintas hermandades que han acompañado y su repertorio se ha ido engrosando poco a poco.