Motores contra el cáncer

Más de 600 inscritos en la segunda “quedada” a beneficio de AECC

29 may 2017 / 17:42 H.

Rodando contra el cáncer es el lema de la concentración que reunió a cientos de aficionados al mundo del motor. Más de 600 inscritos acudieron con motos, quads y vehículos todoterreno rugieron de solidaridad contra una enfermedad que —decían desde la organización—: “Le puede tocar a cualquiera”. El artífice de esta “quedada” fue Moto Club Sierra Las Villas, que despliega, un año más, su lado solidario para doblar el número de participantes de la primera edición, que ya se catalogó de éxito.

En esta ocasión, se sumaron los “cuatro por cuatro”. Acudieron más de 50 vehículos, preparados en su mayoría por sus propietarios, para poder adentrarse en caminos difíciles. LLegaron desde muchos lugares, en especial, las motos, que se aproximaron desde toda la provincia y otras limítrofes. Fue una convivencia de ciclomotores de diferentes estilos: “custom”, tradicionales de carretera, para competición trail en circuito o, simplemente, de paseo. También los quads tuvieron su propio espacio.

La jornada comenzó temprano, con cuatro rutas diferentes en función del tipo de vehículo. Se completó la versión de carretera para motos: unos 80 kilómetros que sirvieron para unir las comarcas de Las Villas, Cazorla, La Loma y El Condado (por ese orden), visitando en ese recorrido varios pueblos.

También se realizaron rutas por caminos de tierra para los vehículos preparados para esas condiciones. Además, todos participaron en una espectacular caravana por las principales calles de la ciudad. Los escoltó la Policía Local.

Por cada kilómetro, los participantes donaron un céntimo de euro que se destinará, junto con la cuota de inscripción, para la delegación local de la Asociación Española Contra el Cáncer (AECC). En esta jornada de convivencia, la organización no gubernamental instaló una barra para vender bebidas y comida de barbacoa a todos los congregados, que, según la organización, pudieron ser más de 1.500 personas. Importante fue también el apoyo institucional del Ayuntamiento. El alcalde, Francisco Miralles, felicitó a la organización por el éxito y sugirió iniciativas con la vista puesta en la tercera edición. El regidor dijo sentirse orgulloso por la solidaridad demostrada y por la excelente organización, de la que se ocupó una decena de miembros del club motero a los que se sumaron otras entidades. Una treintena de voluntarios de la AECC se encargó de diferentes tareas.

La empresa local Toldos L&L instaló un castillo hinchable cuya recaudación fue donada de forma íntegra a la causa. También hubo un homenaje a una joven del municipio, que no pudo superar la enfermedad. Fue recordada como aficionada a las motos por su grupo de amigas y familiares, que portaron una camiseta con su foto durante la jornada. Se celebraron varias sesiones de zumba que alegraron la jornada.