Campoamor y la libertad hoy

Entrega de fin de mes del “señor Jota” encomendándose a una política que arrancó hace un siglo el voto para la mujer > No pensamos ni nos gusta, vamos para atrás

29 ene 2024 / 08:00 H.

En manos de la mujer que procuró la mayor conquista para las españolas y, en consecuencia, para quienes creen que la sociedad es igualitaria y paritaria y no entiende de sexo ni de razas ni hace parada en creencias ideológicas o religiosas, encomienda el ”señor Jota” los “fin de mes” del año 2024 al que ya le devoramos enero, casi sin enterarnos. “La libertad se aprende ejerciéndola”, una frase cuya elocuencia remueve conciencias aún hoy día porque vivimos en un mundo libre y es cuando menos libres vivimos, nos ata el pensamiento único, el miedo a discrepar y hasta nos ancla a la misma baldosa cancelaría la hipoteca con el euríbor disparado. Clara Campoamor conquistó con su perseverancia el voto femenino en 1931, una luz estelar que se ejerció en las elecciones de 1933 y se paró en seco hasta 1977, no tan lejano, los derechos hay que ejercerlos, si no, se apagan.

Adoctrinados y atrincherados, con miedo a pensar y con pereza para pensar, también, que si hacemos lo que nos dicen vivimos menos estresados, si no pensamos lo que hacemos, en apariencia, la conciencia no se nos carga en la almohada y así las cosas, hoy día somos libres si tenemos un par de euros en el bolsillo para una caña con tapa. Ese es nuestro mayor ejercicio de libertad, juntarnos en el bar y despotricar en las barras de los bares, la moraleja de la sociedad actual. Cree el “señor Jota” que dejamos al lado la responsabilidad individual que se hace colectiva por el bien de la democracia, ejercer el derecho al voto cada cuatro años, para en medio, exigir el buen gobierno de nuestros impuestos, para, de un tirón, en la trinchera que nos pille más a mano, desprendernos de todos esos nuestros derechos cuya conquista fue nada fácil.

“Me siento ciudadana antes que mujer”, proclamaba Campoamor, quien abrió los ojos a la política de la República y a los políticos de hace casi un siglo, subrayando con esta proclama nuestro compromiso ineludible como ciudadanos por el preciado bien de la libertad en el presente y, con más ahínco, que sea semilla permanente para las generaciones del futuro. Y es aquí, precisamente, donde el “señor Jota” se pone más veces las manos en la cabeza. La vida se dirime, para la juventud actual, en el terreno minado de las redes sociales, en la inconsciencia de exponer nuestra vida de una forma fantásticamente irreal y abominable solo por el placer de la vanidad. No, claro que no, el acceso a la educación, la capacidad de tomar las riendas de nuestra vida en libertad, mujeres y hombres, no fue luz de un día y vino para quedarse eternamente, hay que ejercerlos cada día, aunque nos miren y nos señalen, pese a que quienes piensan sean mirados con recelo, pese a que quienes discrepan sean colocados en la diana. “Ante todo, soy humanista”, proclamó Campoamor.

$!<i><b>POBREZA.</b></i><i> Niña descalza en Jaén de Filipinas, desigualdad.</i>
POBREZA. Niña descalza en Jaén de Filipinas, desigualdad.
CUESTIÓN PRIMERA

Tenemos derechos, pero olvidamos que hay que regarlos día a día.

CUESTIÓN SEGUNDA

¿Por qué miramos con recelo a quien piensa o lo colocamos en la diana?

MUY PERSONAL

Robin Wiliams, actor norteamericano: “No importa lo que te diga la gente: las palabras y las ideas pueden cambiar el mundo”.
> ¡Pues cambiemos el mundo, sí!

Manuel Ortega, preparador físico: “Estoy viviendo una experiencia extraordinaria en la Copa de África con la selección de Egipto que dirige Pastor”.
> Bahreín, Arabia Saudí y ahora Egipto, de tal palo, tal astilla!

Auxi del Olmo, alcaldesa: “Linares, por su Semana Santa, su arte urbano y su historia se va a colocar en el mapa internacional del turismo”.
> ¡Qué alegría escuchar de Linares otros discursos!

ADIVINA...

> Solo falta él para que el equipo que acompaña al político desde hace casi veinte año esté juntito de nuevo y “colocados”.

ADIVINANZA...

> ¿Por qué la empresa no es capaz de vivir sin subvenciones, qué le han visto a la empresa en derechas y en izquierdas?